Burgo de OSMA: Un fin de semana perfecto
El Burgo de Osma hunde sus raíces históricas en la celtíbera y después romanizada ciudad de Uxama Argaela
Por estas tierras discurre la Vía romana que unía Astorga con Zaragoza; otra secundaria permitía la comunicación con la ciudad de Tiermes.
Esta antigua y monumental ciudad episcopal conserva un interesante recinto fortificado y una importante nómina de edificaciones presididas por la Catedral de Ntra. Sra. de la Asunción. Es uno de los conjuntos históricos más relevantes de Castilla y León.
La catedral de El Burgo de Osma es el monumento más significativo de la villa. Fue en origen románica para rehacerse en estilo gótico a partir del siglo XIII; de este momento es también el claustro. La época renacentista dejó interesantes modificaciones en la fachada y el interior; y el Barroco una impresionante torre. De la época neoclásica algunas de las estructuras más significativas de la Seo como la girola, la Capilla de Palafox o la Sacristía Mayor.
Una hermosa calle Mayor porticada funciona como eje vertebrador de la villa; aquí exponían a la venta sus productos los agricultores y artesanos locales. El Palacio episcopal destaca entre los edificios notables de la calle. Es una obra erigida en el siglo XVI y estilo gótico. La portada ennoblece el edificio residencial de la Sede; se abre en arco doble lobulado de grandes dovelas y un alfiz que enmarca el vano.
En la plaza Mayor dos edificios se enfrentan en los frontispicios principales del ágora burgense: el Ayuntamiento y el antiguo Hospital de San Agustín; en los otros dos frontales los pórticos cobijan comercios y espacios de restauración.
El Hospital de San Agustín es una obra de los siglos XVII y XVIII que organiza su fachada en evidente simetría siguiendo las tendencias de la época. El cuerpo principal aparece flanqueado por dos potentes torres rematadas con chapitel. Sobre la puerta principal y en una hornacina el santo titular.
El restaurante soriano Virrey Palafox, fundado a primeros de los setenta, es toda una institución en la gastronomía castellanoleonesa. Dotado de una extraordinaria bodega de más de doscientas referencias de multitud de denominaciones de origen y llevada con mano maestra por el sumiller César Martínez, el Virrey Palafox será recordado por sus exquisitos torreznos, el tierno cochinillo y también por sus postres, encabezados por la contundente tarta de hojaldre Doña Remedios.
También hay, no obstante, espacio para la innovación, con un bacalao en papillote con parmentier trufado y otras propuestas de temporada que enamorarán al más exigente.
C/de la Universidad, 7, 42300 El Burgo de Osma, Soria
Lo mismo sucede con el mesón Círculo, un pequeño local mítico en el lugar y famoso por sus torreznos, servidos grandes, crujientes y en su punto. Estamos ante uno de esos lugares que han consagrado su actividad a este manjar nunca suficientemente bien ponderado.
De hecho, despachan centenares de kilos por semana de este producto ideal para recordar Burgo de Osma como una cita ineludible. Naturalmente, no podemos olvidarnos de otros productos anexos como la morcilla, las croquetas o incluso los quesos, que en el Círculo sirven con igual talento y profesionalidad.
C/Mayor, 46, 42300 El Burgo de Osma, Soria
La Lobita no está exactamente en Burgo de Osma sino en la Avenida de la Constitución de Navaleno, un pueblo relativamente cercano. Pero el viaje merece la pena: en este pequeño gran restaurante familiar, cuya tradición viene de décadas atrás, son verdaderos devotos de los potajes y comida cocinada en olla no podemos salir descontentos.
Estamos ante un restaurante con estrella Michelín donde su responsable, la joven y entusiasta Elena Lucas, exprime hasta la última gota de la gastronomía tradicional y la buena mesa soriana. Lo hace con talento y entusiasmo, respetando y alabando el producto de proximidad como se debe.
Av. de la Constitución, 54, 42149 Navaleno, Soria
Burgo de OSMA: Un fin de semana perfecto
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